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Docentes de Santa Cruz suspenden la huelga
Al filo del plazo judicial para resolver sobre la ilegalidad de la huelga, el congreso de la Asociación Docentes de esa provincia dispuso anoche suspender la medida de fuerza, por la que desde hace casi dos meses no dictan clases. De este modo, levantarán el paro desde hoy a las 21, de acuerdo a lo resuelto por los congresales
Los docentes de Santa Cruz decidieron anoche suspender las medidas de fuerza que llevaban adelante en reclamo salarial desde el 13 de abril pasado, mientras aguardan una convocatoria del gobernador Daniel Peralta al diálogo.
La definición la adoptó el congreso de ADOSAC, que se reunió en Caleta Olivia, y de este modo levantarán el paro desde hoy a las 21, de acuerdo con lo resuelto por los congresales.
Fuentes gremiales señalaron a la agencia DyN que seguirán realizando «actividades para hacer conocer el reclamo salarial» y esperan «una convocatoria del gobierno de Daniel Peralta para avanzar en las
negociaciones salariales».
Por su parte, el gobierno provincial informó que «se
restituyeron la totalidad de los establecimientos educativos que habían sido accionados por los alumnos» durante el conflicto en reclamo de «la vuelta a clases».
Una de las principales propuestas que se analizó fue la posibilidad de suspender la huelga hasta agosto, para que los niños puedan recibir clase y se den las condiciones para reanudar el diálogo con las autoridades locales.
Ayer, los maestros santacruceños cumplieron 58 días de paro desde el inicio del ciclo lectivo el 28 de febrero pasado, en reclamo de un aumento salarial de 50%.
El martes, además, venció el plazo para que el gremio conteste la demanda de ilegalidad de la huelga, que le corriera vista el juez Enrique Arenillas.
A partir de dicha contestación, el magistrado tenía todos los elementos para dictar sentencia.
La suspensión de la medida, justo en este momento, busca poner paños fríos a la instancia judicial, que de resultar favorable al gobierno provincial sería catastrófica para el gremio, ya que correría peligro no sólo la personería gremial sino también daría vía libre a las autoridades para cursar los telegramas de despidos con causa a los maestros que siguieran adelante con la medida de fuerza.