Crecen las disputas internas en CGT: ¿Hay garantías de un paro general?

La CGT atraviesa momentos de alta tensión. A horas de la reunión de Consejo Directivo, los máximos líderes de la central tejen alianzas y buscan respaldos en torno a la convocatoria (o no) de un plan de acción contra el gobierno de Javier Milei. Hay posiciones encontradas y distantes.

La realidad indica que, a pesar del ¿apresurado? anuncio de Héctor Daer, la huelga todavía no fue oficializada. Por eso, la primera incógnita tiene que ver, más allá de la modalidad y la fecha para un eventual paro, con la realización en sí de la medida, que «tiene que ser contundente o no ser«, apuntó un dirigente por lo bajo a este medio. Este es el punto de discusión y la línea que muchos defenderán mañana.

¿Todos los sectores podrían garantizar un paro total? Los reparos surgen desde organizaciones más ligadas a sectores productivos, donde no estarían dadas las condiciones para garantizar un paro con la contundencia deseada. La visión también aplica a sectores del Estado en los cuáles «muchos trabajadores todavía bancan al Gobierno», según planteó un sindicato estatal a Mundo Gremial.

El dilema está también en las organizaciones que lograron encausar diálogos y cuentan con acuerdos avanzados. No estarían dispuestos a poner en riesgo las conversaciones con el Gobierno.

Daer confirmó que la CGT irá a un paro general “antes del 10 de abril”

A Daer lo dejaron en offside. El anuncio del dirigente de la Sanidad en el marco del congreso de la UTEP caldeó aún más los ánimos y en la reunión de mañana este tema será punto de conversación. En sectores de la CGT sostienen que no fue adecuado ni el momento ni el contexto para comunicar la decisión de un paro general. Hay broncas.

La posibilidad de avanzar en medidas de fuerza contra el gobierno de Milei había quedado definida en la reunión de mesa chica en UPCN, pero la declaración de Daer ante los trabajadores de la economía popular con fecha tentativa para el paro aceleró las discusiones. Horas después del anuncio de Daer, Octavio Arguello, co titular de la CGT y hombre de Hugo Moyano en la central, marcó la cancha y dejó en claro que será el consejo directivo quien determinará qué hacer.

“Si el Gobierno sigue en esta actitud se va a ir profundizando la protesta”, avisó Argüello

En paralelo, el sorpresivo dardo que tiró ayer Luis Barrionuevo profundizó las grietas internas y abrió otro escenario de especulaciones. Es que el gastronómico redobló la apuesta y pidió un paro por 36 horas con movilización, en lo que algunos leen como otro puñal en la pugna por el poder cegetista. Esa postura gana validez con el pedido de adelantamiento de elecciones que hizo el barrionuevismo.

Barrionuevo propone un paro general de 36 horas y el adelantamiento de elecciones en la CGT

El posicionamiento de Barrionuevo no fue inocente. Apuntó y pegó. Y la bala fue recibida. Ahora vendrán horas de discusión interna y -sobre todo- de decisión. ¿Está en riesgo el paro general?