Conéctate con nosotros

ANÁLISIS Y OPINIÓN

Antonio Caló, el caballo de Troya

A un mes del Congreso de la CGT, continúan las negociaciones para definir a la nueva conducción. Daer y Moyano suenan fuerte. ¿Suman al titular de la UOM a un triunvirato?

Publicado

|

Si fuese por peso de bandas, en el Congreso de la CGT del próximo 11 de noviembre en Parque Norte, la CGT debería definir un binomio a la cabeza de conducción. Por un lado, ratificar la renovación de Héctor Daer, con el apoyo de los Gordos más los Independientes. Y por el otro, a Pablo Moyano con el Frente Sindical y los aliados del SEMUN conducidos por Sergio Sasia.

Pero desde hace días desde diferentes sectores, mediáticos y políticos, se empezó a ensayar el nombre de Antonio Caló. Esto tiene varias lecturas. Después de la imposibilidad (hasta ahora) de que Vanesa Siley y sus judiciales integren la CGT, el kirchnerismo se quedó sin poder jugar una ficha en la conducción de la central. Con Vanesa, también se saldaba el cupo femenino, elemento que vamos a analizar posteriormente.

Sergio Palazzo

El otro nombre era Sergio Palazzo de La Bancaria, pero en Azopardo y en la diáspora tampoco le confían. “Solo pelea por la de él, se vio en los cierres de listas”, dicen en los asados con aforo.

Ante este tablero de juego, se empezó a ensayar otra alternativa. “Y si impulsamos a alguien que no sean tan nuestro, pero que podamos generar un romance con el tiempo, y termine terciando ante dos potencias. Puede ser el equilibrio que necesitamos”, ensayan en Rodríguez Peña 80. “Sería inteligente también que la CGT ponga alguien con buen diálogo de este lado, nadie como Cristiana le dio derechos a los trabajadores y trabajadoras”, me comenta un alto funcionario.

El ensayo de Caló también se trabaja discursivamente, con la necesidad de incorporar en la conducción de la CGT alguien que venga del sector de la industria. Pero el sistema hoy tiene otra lógica: es de poroteo y de espacios.

A título personal a este tema le agrego el problema que generaría en términos de agenda, que en la propia conducción de la CGT sean 3 hombres y no haya una mujer. Aplicando el sistema actual, no se encuentra en las filas una mujer sindicalista con los congresales y el apoyo de un espacio para subirse al podio el 11 de noviembre.

En la charla con los cancilleres de las últimas reuniones de aproximación y maridaje, todos coincidieron en marcar que el nombre de Antonio Caló tampoco estuvo en la mesa, “nunca se habló de él”. Y ante la consulta que le hicieron, él tampoco se vio jugando.

Algún sector de Azopardo lo que si imagina es un o una dirigente que pueda terciar, intermediar entre Héctor y Pablo, pero no lo encuentran hasta hoy.

Falta un mes y el escenario puede volverse totalmente opuesto al planteo de hoy, lo que subsiste es el sistema.

Los ravioles y la generacional.

Los espacios empezaron a tantear suavemente donde se ven en el caso de integrarse a la conducción de la CGT. En Azopardo tienen la llave del Congreso Extraordinario para poder generar los espacios que faltan con nuevas secretarías. Pero hay aspiraciones y lugares donde algunos dirigentes se ven caminando. Se esperan secretarías activas, un Azopardo con movimiento, con equipos trabajando, y con una agenda que la situación política está generando el espacio para su funcionamiento. El bastón del mariscal se está calentando.

También se va a resolver el tema de paridad – cupo en el mismo lugar. Pero algo que seguramente sea interesante y va tomando peso es el cambio generacional que se va a ver en la foto de noviembre. Pablo Moyano se viene moviendo con un grupo de dirigentes menores de 50 años, y en Azopardo pueden surgir algunos recambios que modifiquen un cuadro para un escenario complejo para el futuro del trabajo.

Juan Manuel Morena, director de Mundo Gremial.

Copyright © 2018 MUNDO GREMAIL. Desing by | dosveintiuno