¿A quién le servía la falsa renuncia de Pablo Moyano a la CGT?
La versión de la salida del moyanismo de la central obrera generó un fuerte revuelo en el mundo gremial y una reunión de urgencia del Frente Sindical. El camionero nunca se bajó y seguirá en el triunvirato.
El rumor comenzó a circular en horas de la mañana en el mundo sindical. La versión de una ruptura en la conducción de la CGT y una posible renuncia de Pablo Moyano a la secretaría general alteró ánimos y todo derivó en una reunión de urgencia en Camioneros.
Hasta la sede porteña de San José llegaron los principales referentes del Frente Sindical, tras horas de un intenso cruces de llamadas y mensajes, en algunos casos con cierta sorpresa ante los trascendidos de una potencial salida de Moyano de la central obrera.
Es que, a pesar de las marcadas diferencias entre el sector moyanista y el ala de los Gordos e Independientes, no existía -ni existe- un marco claro que determinara la abrupta salida de Moyano del triunvirato.
La reunión en sede camionera sirvió para despejar dudas, cara a cara, y clarificar de dónde nació el rumor, que habría sido fruto de una conversación privada que Pablo Moyano habría mantenido con un cercano a quien le habría deslizado la posibilidad de bajarse de la conducción cegetista.
«No era una decisión«, aseguran a Mundo Gremial. Y así lo ratificó Mario «Paco» Manrique, secretario gremial de CGT, a El Destape Radio tras la cumbre del Frente Sindical en Camioneros: «Jamás Pablo Moyano habló con ningun medio para decir que se iba de la CGT. El presidente de la Nación puede comer asado con quien quiera».
La última oración de Manrique refiere a uno de los temas que según las versiones habrían generado enojo en el moyanismo, que ahora busca calmar las aguas al razonar sobre agendas distintas que manejan los diferentes sectores que componen la central sindical.
Y es ahí el mayor inconveniente de la CGT: la ausencia de una agenda definida. Moyano lleva su agenda, y los Gordos, también. La falta de un trazado común, programático, hoy no garantiza la unidad real.
Ahora bien, ¿a quién le servía la falsa renuncia de Pablo Moyano? Hay quienes sostienen que todo fue producto de una movida generada desde el interior de su propio sindicato.
Pero si algo quedó reflejado con lo actuado hoy en el entorno del moyanismo -señalan- es «quién juega a qué y con quién en todo esto». A saber: ubican la situación en el marco de una CGT muy politizada impregnada con los problemas de interna en el gobierno, con operadores que juegan a eso y que intentan llevar a la dirigencia a involucrarse en lo electoral más que en la necesidad de una agenda de la central y de los trabajadores.
Lo vivido este martes generó enojos en el entorno del Frente Sindical, y algunos aliados al esquema ya lo hicieron saber. En tanto, desde un sector de los Gordos mostraron preocupación a este portal por el actual funcionamiento de la central y la descoordinación constante, con una CGT inmersa en la disputa política del Frente de Todos.