Desde esta medianoche comenzarán a regir por al menos 3 semanas las medidas de cuidado dispuestas en el nuevo decreto de Distanciamiento Social (DISPO) que publicó hoy el gobierno nacional; no se podrá circular entre las 0 y las 6, habrá fuertes restricciones en el uso del transporte público y un acortamiento en el horario de bares y restaurantes, que podrán funcionar hasta las 23, lo que ya provocó las quejas de los gastronómicos que advierten por el cierre de casi 5 mil locales en todo el país desde que comenzaron los controles por la pandemia de coronavirus.
Ante la irrupción de la segunda ola de Covid-19, el gobierno decidió enmendar el DNU con duras restricciones con el fin de reducir la circulación nocturna, está prohibida entre 0 y las 6, y se reforzará el control en los trenes, subtes y colectivos para queden reservados exclusivamente para quienes cumplen tareas esenciales, se trasladen a establecimientos educativos o hayan pedido un permiso especial. No habrá, por ahora, un refuerzo en las frecuencias de las unidades para evitar aglomeraciones, según indicó el ministro de Transporte, Mario Meoni. Los usuarios tendrán que tener vigente la aplicación CUIDAR con los permisos de circulación correspondientes.
En este sentido, habrá mayores “controles de fuerzas de seguridad” federales en las cabeceras, paradas, peajes y accesos a la Ciudad de Buenos Aires y también por parte de personal de “las propias jurisdicciones”. A diferencia de lo ocurrido en 2020, fuentes de Transporte indicaron que no está “planteado el bloqueo de las tarjetas SUBE para quienes viajen sin permiso de circulación ya que cuando estuvo activo la incidencia de usuarios fue muy baja”.
En los hechos, el gobierno sigue influido por el año electoral y quiere evitar el malhumor social: como tampoco habrá secuestro de auto de “los infractores” al virtual toque de queda nocturno, se decidió no suspender la tarjeta de los usuarios del transporte y, en cambio, apelar a la responsabilidad social para poder reducir la circulación del virus hasta el 30 de abril.
Lo cierto es que más allá de los trabajadores de rubros no esenciales que ya manifestaron su preocupación por los impedimentos para trasladarse hacia su trabajo y la falta de empatía de los empleadores para garantizar el teletrabajo, las medidas despertaron las quejas de algunos gremios preocupados por la continuidad laboral de muchos empleados.
Es el caso de Dante Camaño, titular del gremio de los Gastronómicos, que, en diálogo con Mundo Gremial, dijo que pidió explicaciones a los ministros de Turismo, Matías Lammens, y de Trabajo, Claudio Moroni, pero no ha obtenido respuestas. “Son preocupantes las nuevas medidas porque sólo en la Ciudad han cerrado 2 mil locales y casi 5 mil en todo el país. Pero hablamos del mercado formal, en la informalidad ha sido peor”, indicó.
En este sentido, el dirigente gremial enfatizó que “hay que apelar a la responsabilidad individual y a la vacunación. En Estados Unidos, tanto en la costa Este como en la Oeste, hay casi 50 formas de aplicar vacunas en forma gratuita. Hoy vimos mucha gente en el centro por las protestas. No se entiende lo que quiere hacer el gobierno”.