La fábrica de camiones Iveco, ubicada en la localidad cordobesa de Ferreyra, anunció la suspensión de su producción hasta el 15 de abril de 2020. La medida rige desde hoy afectando a más de 2.000 familias.
Desde la empresa argumentaron que cuentan con una acumulación de stock de 1.500 camiones, suficiente para hacer frente a la demanda por un lapso de ocho meses, por lo que consideran “inviable” mantener el ritmo productivo.
Iveco cuenta con 500 trabajadores en su plantilla, que es el número que quedó luego del recorte llevado adelante en 2018 con 200 desvinculaciones. No obstante, la medida afectará a otros 1.500 trabajadores que se desempeñan en empresas proveedoras.
En tanto, la Cámara de Industriales Metalúrgicos y de Componentes de Córdoba (CIMCC) se mostró preocupada por el impacto de la decisión de la compañía y aseguraron que “al menos 15 pequeñas y medianas empresas se verán afectadas por esta suspensión”.
Por otra parte, desde la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) recordaron que rige un acuerdo de estabilidad laboral entre los trabajadores y la empresa para que se conserven las fuentes de trabajo. Dicho acuerdo tiene vigencia hasta fines de 2020 y establece que en caso de suspensiones obligadas, se deberá afrontar el pago del 75% del salario.
“La situación alerta a los proveedores del sector por las críticas consecuencias que pueden desencadenar a nivel social, sindical y económico”, señalaron desde CIMCC.