Por Juan Manuel Morena, Director de Mundo Gremial.
Para poder aclarar el juego se necesita generar espacio, abrir la cancha, cortar en diagonal, hacer un pique corto y presionar. Vale para varios deportes, particularmente para el más popular en Argentina.
El proceso Macri vs Moyano tiene ese sabor, se abrió la cancha, se ordenaron los frentes, se diluyeron los subgrupos momentáneamente (o están en proceso de eso) y se clarificaron los acuerdos que todos tenían.
El triunvirato, el MASA y la 6,2 se reordenan de cara al #21f. Todos sabíamos que eran dos CGT después de marzo, pero de la ruptura en un Congreso con posturas encontradas. Hoy ya nacen totalmente separadas, esa es la particularidad. Una CGT dialoguista y otra combativa (que se queda en Azopardo).
El posible acuerdo PJ, movimientos sociales, la CGT (con aires al MTA), los kirchneristas, y algunos más, se encuentran en ese movimiento que hace Moyano, el espacio necesario para una jugada. No se sabe cómo deriva, pero es la jugada más significativa en términos de relación de poder que tiene una oposición en nuestro país. Muchos más espacios con fuerza no quedan.
Queda espacio de negociación entre Moyano y Macri, ellos eligieron enfrentarse personalmente, en realidad es una buena pregunta que se podría hacer en los dos casos, y cuesta pensar que no existe ese lugar de dialogo.
La diagonal que tiro Moyano no es un acuerdo con la defensa de Mauricio, también podríamos imaginar=. Es un escenario que los dos pueden capitalizar. La jefa desapareció de la escena pública (la hicieron desaparecer), y alguien tiene que ocupar ese lugar, y nadie mejor que mi villano favorito. Aquel que se sabe llevar la marca, es siempre el diferente.